Comunicarse con el maestro de su hijo es una manera de ayudarlo a tener éxito en la escuela. Pero, ¿con qué frecuencia debe notificarse con el maestro y qué preguntas debe hacer? ¿Y cuándo hacen las interrogaciones o el consejo de comportamiento de un padre de apropiado a entrometido?
Los padres que toman un interés activo en el trabajo de sus hijos y el bienestar escolar son uno de los mayores contribuyentes al éxito de mis estudiantes, expresa Parks. Los hijos de padres involucrados típicamente poseen una mayor autoestima y menos problemas de conducta en la escuela. Y las calificaciones de los estudiantes generalmente mejoran cuando sus padres se involucran.
Si su colegio pública calificaciones en línea, asegúrese de revisarlas con frecuencia. Enviar un correo electrónico al profesor también es una buena forma de obtener un informe de estado rápido. El correo electrónico ha sido una bendición, expresa, porque es menos intrusivo para el pedagogo y menos ceñudo para el padre.
Pregúntele a la maestra si cree que su hijo está haciendo su mejor esfuerzo en la clase y si ha notado algún cambio significativo en el comportamiento o las calificaciones de su hijo, sugiere Parks. Igualmente es una buena idea averiguar si a la maestra le preocupan los amigos que su hijo ha elegido. Asegúrese de entender la política del maestro para recuperar el trabajo perdido y no se olvide de preguntar sobre la mejor manera de mantenerse en contacto durante todo el año.
Primero, trate de averiguar si la cantidad de trabajo realmente es excesiva. Quince minutos por nivel de grado cada noche es lo correcto, expresa Parks. Si el paralelismo de tarea parece demasiado, piense si sucede con frecuencia o solo de vez en cuando. Ciertas unidades y proyectos simplemente requieren más tarea.
¿Cómo debe un padre aproximarse al maestro sobre esto?
No entres con la actitud de que el maestro está equivocado. En su lugar, pida consejo sobre cómo puede ayudar a su hijo a lidiar con la tarea monstruosa. Aprobar que el maestro sugiera soluciones es mucho más práctico que desafiar su sabiduría, expresa Parks.
